TELÉFONO:
No se puede recomendar una edad exacta a la que los hijos puedan tener móvil, cada niño, cada familia y cada situación son diferentes. Si nos guiamos por el sentido común, podremos permitir que nuestro hijo tenga móvil sólo en las ocasiones en las que le resulte necesario. Una sugerencia es que para determinadas actividades puedan utilizar un teléfono móvil de la familia, es decir, un terminal extra que no pertenece a nadie en concreto, sino que está disponible para que lo use el que lo necesite o le prestemos el nuestro, por ejemplo, el día que sale con los amigos, si va solo en transporte público o cuando nos interese que esté localizable.
Las siguientes directrices pueden servir de orientación en esta tarea, adáptalas a tu familia:
- Observa el uso que tu hijo hace del móvil. La mejor herramienta de los padres es la observación directa del comportamiento de sus hijos. Es fácil ver si el uso que el niño da al teléfono móvil es adecuado o bien lo está utilizando excesivamente, como un simple juguete más. Normalmente los/as niños/as utilizan el móvil más para jugar, escuchar música, como reloj o despertador, que para hablar. A partir de adolescencia ya comienzan a utilizarlo con más frecuencia para enviar mensajes de texto.
- Enséñale a utilizarlo sólo cuando sea necesario y no haya otra forma de comunicarse. En muchas ocasiones lo utilizan desde su propio hogar, cuando disponen de un teléfono fijo que resultaría mucho más económico.
- Pídele que sus conversaciones sean cortas.
- Pon un límite de gasto mensual y de tiempo de uso. Cada niño, cada familia y cada situación son diferentes, pero en cualquiera de ellas debe establecerse un gasto máximo al mes.
- Hazle responsable del gasto que genera su móvil. El hijo debe asumir este gasto, normalmente con el dinero semanal que recibe de paga.
- Dale a conocer las tarifas telefónicas. Para que se haga responsable del gasto es necesario que conozca las tarifas de cada una de las acciones que realiza con el teléfono: horarios más caros de llamadas, coste de establecimiento de llamada o minuto de conexión, coste de envío de mensajes de texto o multimedia, de descargas y otras utilidades.
- No le permitas superar estos límites de tiempo o dinero establecido. La solución es sencilla en el caso del gasto, no permitirle recargar la tarjeta o superar el límite de gasto mensual establecido, si es de contrato. Lo más complicado al comienzo de su uso será el límite de tiempo.
- Exígele que apague el teléfono cuando no lo necesite o no pueda utilizarlo: mientras estudia, come en familia o duerme.
- No permitas que realice descargas de videos, politonos o intercambio de archivos de forma continua.
- Infórmale de los riesgos que conlleva tener el Bluetooth activado. Cualquiera podría enviarle un virus que estropee de manera fulminante el móvil. Debe activarlo únicamente para intercambiar algún archivo y luego volver a desactivarlo.
- Intenta que el teléfono móvil no te separe de tus hijos por ser un instrumento o un lenguaje que desconoces.
A continuación, te proponemos algunas ideas básicas PARA HIJOS en cuanto al uso del teléfono móvil:
1. Utiliza tu móvil sólo cuando sea necesario. Partiendo de que el concepto de necesario es difícil de concretar y diferente para padres e hijos, para precisarlo tendrás que pactar con tu familia las situaciones de uso.
2. Utilízalo de forma que no te aísle de las personas que te rodean. Y cuando lo hagas observa las normas básicas de educación y cortesía.
3. El teléfono móvil debe estar apagado en lugares donde no esté permitido su uso. Apágalo en cines, teatros, museos, reuniones, en clase o en el colegio, en el médico, en cualquier lugar donde se solicite que esté desconectado (hospital, avión, etc.). También en casa mientras estás con tu familia, estudias o duermes.
4. Da prioridad a las personas con las que estás hablando físicamente frente a la persona que te llama al móvil. Es decir, no ocurre nada por no contestar una llamada en un momento determinado y responder con otra llamada más tarde. Y en el caso de que sea necesario contestar al instante, pide disculpas a la persona con la que estés.
5. Controla lo que gastas cada mes y conoce las tarifas de tu teléfono. Recuerda no sobrepasar el límite acordado.
6. Utiliza otros medios de comunicación que se adapten más a otras circunstancias. Por ejemplo, el teléfono fijo para llamar a otro fijo -más económico-, el correo, una reunión de amigos u otros canales de comunicación.
7. Pide permiso antes de fotografiar o grabar a alguien.
Información obtenida de:
(16) Uso responsable de las nuevas tecnologías para niños – Parole Ostili – YouTube